DESCUBRE LOS BENEFICIOS DE LA MIEL Y ELL BICARBONATO
El bicarbonato de sodio, también conocido como bicarbonato sódico o carbonato, es un polvo blanco que todos tenemos o hemos tenido en nuestros hogares, ya que tiene infinitos usos. Las mamás siempre lo tienen guardado en la cocina para la gastronomía e incluso para limpiar.
Es un producto que se consigue fácilmente en la naturaleza, pero que ha sido industrializado para que todo el que lo requiera pueda adquirirlo. Es importante destacar que no contiene aditivos, por lo cual tiene más beneficios que desventajas.
Beneficios del bicarbonato de sodio
Es importante que antes de comenzar a usar el bicarbonato le indiques a tu médico que lo estás consumiendo y en qué cantidades, para que tu salud no se vea afectada.
El bicarbontano de sodio puede hacer de:
1. Digestivo natural
Este ingrediente es el mejor amigo del sistema digestivo, ya que ayuda a aliviar las flatulencias y a digerir las comidas pesadas más rápidamente
2. Antiácido natural
bicarbonato-sodio
Es ideal para el reflujo gastroesofágico, ya que convierte el ácido clorhídrico que sube del estómago al esófago en cloruro de sodio. Esta transformación detiene el ardor y proporciona un alivio inmediato.
3. Depurativo
Es excelente para ayudar al hígado a deshacerse de las toxinas que nuestro cuerpo no puede digerir. También es rico en vitamina C y en potasio, por lo tanto, es uno de los mejores antioxidantes naturales que existen.
4. Antiséptico
Bicarbonato-de-sodio
Gracias a sus propiedades, el bicarbonato sódico sirve para aliviar las infecciones y neutralizar bacterias y virus. Es conocido por ayudar a disminuir el dolor y la inflamación en caso de infección de garganta.
5. Antigripal
Es un remedio casero muy utilizado para tratar la gripe y el malestar general. Es el mejor aliado a la hora de combatir todas aquellas bacterias causantes de la gripe, además de que ayuda a disminuir los síntomas de infección ocasionados por esta.
6. Combate la cistitis
Síntomas de la colecistitis
Al consumir bicarbonato ayudamos a nuestros riñones a crear una barrera protectora contra bacterias. En caso de una infección urinaria, también es recomendable el consumo de bicarbonato sódico, ya que ayuda a tratar los síntomas.
Tratamiento con bicarbonato de sodio y miel
Tratamiento con bicarbonato de sodio y miel
Comentamos que el bicarbonato es excelente para combatir bacterias, infecciones y varias enfermedades. De igual forma, la combinación del bicarbontano de socio con miel es ideal para tratar problemas dermatológicos, específicamente los del rostro.
Y es que el bicarbonato puede ayudarnos a eliminar y prevenir la aparición de granos, además de exfoliar la piel deshaciéndose de las células muertas.
Ingredientes
¼ de taza de bicarbonato de sodio (120 g).
1 taza de miel de abejas (preferiblemente natural) (250 g) .
Preparación
Mezcla el bicarbonato con la miel, que hacen una taza en una olla.
Revuelve la mezcla hasta que consigas una pasta espesa y homogénea.
Concínala, preferiblemente a baño María durante 10 minutos revolviendo de vez en cuando.
Apaga y reserva.
Aplicación
Lo recomendable es consumir entre 2-3 cucharadas de esta mezcla diariamente durante un mes. Lo puedes hacer después o antes de cada comida. Sin embargo, es importante que no superes el mes de uso y que evites consumir alimentos como carnes rojas, harinas y azúcares.
Este tratamiento tiene aplicación para distintas enfermedades, tales como diabetes, gripe y enfermedades renales. Recuerda siempre consultar a tu médico que estas consumiendo este remedio casero.
Mascarilla contra el acné
Pasos para las pieles con acné
Otro uso que se le atribuye al bicarbonato de sodio mezclado con la miel de abeja es el de combatir el acné o los granitos. Las mascarillas aparte de ser baratas y fáciles de elaborar, resultan muy efectivas para el cutis.
Esta preparación la puedes usar una o dos veces por semana. Te ayudará a deshacerte de celulas muertas, bacterias, acné y aportará brillo a tu rostro, ya que hidrata y humecta la piel.
Ingedientes
2 cucharadas de bicarbonato de sodio (30 g).
1 cucharadade miel de abejas (15 g).
Jugo de limón.
Preparación
Forma una pasta mezclando el bicarbonato con la miel y el jugo de limón.
Esparce la mezcla por todo el rostro, en movimientos circulares.
Déjala reposar por 10 minutos.
Retira la mascarilla con agua tibia.
Seca tu rostro a toques con una toalla limpia.
Aplica un hidratante para sellar tus poros.
